Estoy abrumada por todos los comentarios que me estáis dejando los seguidores del blog. No cabe más felicidad, asombro y sorpresa en mi cuerpo. Por ello, qué menos que dedicar una entrada a expresar mi agradecimiento, pero antes me gustaría explicar todas las razones que me llevaron a ser profe de Educación Infantil.
Desde muy pequeña me atrajo el mundo de la enseñanza y aunque en un principio quise ser profe de secundaria para dar clase de física y química, reflexionando, me planteé las siguientes preguntas:
¿En
qué trabajo cuando faltas dos días te reciben con los brazos abiertos?, ¿Dónde
recibir como regalo diario montones de sonrisas?, ¿En qué lugar mis palabras
causarán tanto asombro?, ¿Cómo ver en primera fila la ejecución de grandes
obras de arte?, ¿A dónde dirigirme para
guiar la escritura de una manita que quizá algún día escriba un gran libro?.
Pues bien, la respuesta a todas estas preguntas que me hice está claramente en la etapa de Educación Infantil, una etapa tierna en la que me siento cómoda y feliz, donde he encontrado mi sitio, un mundo donde sólo tienen cabida la alegría, la imaginación y la fantasía. En definitiva, un mundo que me hace recordar las palabras de Joseph Heller: "He llegado por fin a lo que quería ser de mayor, un niño".
GRACIAS Vicky y Carmen, hermana y mamá de dos elmucas, Zoe y Lara, alumnas mías del curso pasado, por seguir recordándome y plasmar vuestra impresión de mi quehacer docente para que los nuevos seguidores me conozcan un poco más.
GRACIAS Vanessa, Bea, Sonia y Anónimo, mamis de los melisucos, por apoyarme desde el principio sin apenas conocerme y captar tan rápido la esencia de mi ser y de mi trabajo.
GRACIAS a las familias de los melisucos que me dejáis esos comentarios tan motivadores en la libreta mensajera con tan solo un mes que llevo con vosotros.
GRACIAS Marlén, Marián e Higuera, tres seguidores incondicionales desde el curso pasado que me animan tanto a seguir adelante con mi trabajo.
GRACIAS papi y mami por hacer de mí lo que soy hoy en día. A ti papi, te debo el gen de la pasión por la enseñanza y por todo lo que hago, desde lo cotidiano hasta lo profesional. A ti mami, te debo el gen luchador y trabajador incansable. A los dos os debo mi esfuerzo por dar lo mejor de mi misma día a día y la plena dedicación a mi profesión, que adoro y disfruto muchísimo. GRACIAS papi y mami porque tras finalizar mi Licenciatura en Química, me brindasteis la oportunidad de reconducir mi vida para cursar la Diplomatura de Educación Infantil y dedicarme a lo que más me gusta.
A mis papis, a Marlén, a todos los seguidores del blog y a las familias de los elmucos y melisucos, GRACIAS por valorarme tanto, sois el mejor combustible para que la llama de mi ilusión por continuar con mi labor docente siga viva día a día. Por ello, en señal de mi agradecimiento, os mando muchos besinos.